
Y ya estaba enfilando el último día del viaje.
A las 9 de la mañana salía el bus hacia Pamplona. Más de la mitad del recorrido lo hicimos por carretera nacional, lo que me sirvió para ir sacando unas cuantas fotos.
En apenas hora y media habíamos llegado. Pensaba dejar la maleta en consigna y darme una vuelta por la ciudad, pero al preguntar los horarios para ir a Donostia me dijeron que uno que iba directo salía justo a las 11 h., y no me lo pensé dos veces. De repente me entraron ganas de llegar...