Lo bueno que trae la Semana Santa, y con ella las innumerables procesiones que dan colorido a este país de ignorantes, es el resultado económico, el movimiento de la economía, los puestos de trabajo que se generan. Sólo por eso, ya merece la pena. Solamente en Sevilla mueve 69 cofradías (interesante número) que consiguen una ocupación hotelera del 100%. El impacto económico en la ciudad se mueve en la nada desdeñable cifra de varias decenas de millones de euros.
Sí, he dicho "ignorantes" porque en un programa de tv, iban preguntando a la gente de la calle por qué creía o qué representaban para ella las procesiones, y las respuestas eran para llorar. Hubo uno que dijo que "era lo que le habían enseñado desde pequeño y ya está".
¡¡¡Ele, ele y ele!!!
Pero bueno, a mí lo que realmente me ha impactado en esta Semana Santa, es ver la la Legión desfilando con el "Cristo de la Buena Muerte".
Sí, la verdad es que tengo que reconocer que yo también soy un pobre ignorante, porque esto se viene celebrando desde 1921... ¡Cagüenlaleche...! Y yo sin saberlo! Pero sí, ver a la Legión desfilando con el susodicho Cristo, más que provocar devoción, acojona.
Cualquiera les dice a estos pollos que más allá del folclore y el dineral que genera todo esto, no hay nada. Absolutamente nada. ¡Dios me libre!
Y efectivamente, esto tiene su público... mucho público.
Insisto: ¡País de ignorantes!
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Sí, he dicho "ignorantes" porque en un programa de tv, iban preguntando a la gente de la calle por qué creía o qué representaban para ella las procesiones, y las respuestas eran para llorar. Hubo uno que dijo que "era lo que le habían enseñado desde pequeño y ya está".
¡¡¡Ele, ele y ele!!!
Pero bueno, a mí lo que realmente me ha impactado en esta Semana Santa, es ver la la Legión desfilando con el "Cristo de la Buena Muerte".
Sí, la verdad es que tengo que reconocer que yo también soy un pobre ignorante, porque esto se viene celebrando desde 1921... ¡Cagüenlaleche...! Y yo sin saberlo! Pero sí, ver a la Legión desfilando con el susodicho Cristo, más que provocar devoción, acojona.
Cualquiera les dice a estos pollos que más allá del folclore y el dineral que genera todo esto, no hay nada. Absolutamente nada. ¡Dios me libre!
Y efectivamente, esto tiene su público... mucho público.
Insisto: ¡País de ignorantes!