UN VIAJE POR URUGUAY Y ARGENTINA: DÍA 15

DÍA 24 DE OCTUBRE

Nos quedaba la última visita, al famoso barrio de Boca, que es conocido fundamentalmente por el estadio de fútbol y porque fue el equipo de Maradona.
Además de eso,  destaca por el increíble colorido de muchas de sus calles, hoy importante centro turístico. Parece ser que todo esto comenzó en la década de los 50 cuando se intentó recuperar un callejón denominado "Caminito".

La cuestión es que fue una visita guiada muy amena con un guía estupendo.

Después de la visita nos quedamos a comer en el barrio, en un restaurante que el guía nos había dicho que tenía comida vegetariana. Cómo  será el tema que lo único que tenían que no llevase carne eran una escuálidas ensaladas, cada cual menos atractiva. Y es que, vayas donde vayas, aquí la carne está en el 99% de los menús.  Terrible.

Por la tarde, nos quedamos descansando un rato, organizamos nuestra agenda para los siguientes días y nos dimos un paseo por el entorno del hotel.

Paseamos por una de las calles que no habíamos ni siquiera pisado y... ¿Cuál  fue la sorpresa? Que era una calle llena de librerías. Pero hasta tal punto de que contamos a ojo más de 30, muchas de ellas seguidas una de otra. Pero nada de pequeñas librerías, no, enormes librerías con miles y miles de libros. Una de ellas concretamente tenía más de 30 metros de fondo y 6-7 de ancho. Increible. Sé de uno que se hubiese pasado todas las vacaciones paseando por esa calle. También había unas cuantas tiendas dedicadas al disco y al vinilo, pero no llamaban tanto la atención.

No pude resistirme y entré a preguntar en una de ellas a ver si tanta librería daba para vivir. Me atendió amablemente un librero que me explicó que aquí tradicionalmente se lee mucho, que lo libros no pagan impuestos y que además tienen un precio fijo, por lo que las grandes superficies no pueden tirar los precios. Además, dato curioso, la gente que lee ebook no debe de llegar al 1%. Aún así han debido de cerrar unas cuantas librerías debido a la crisis.

Fue una conversación muy amena y muy agradable.

Ah, me falta por comentar, que si  bien la simpatía de las porteños no llega al nivel de los uruguayos, nos hemos sentido muy bien atendidos e informados en todo momento. Y si bien se puede hacer esa distinción yo creo que gran influencia tiene lo enorme que es Buenos Aires y la prisa con la que se vive. Pero a pesar de ello, insisto, nos hemos sentido muy bien atendidos en  todo momento.