¿PARA QUÉ TANTA PRISA?

 - Pero escuché que Fargo "el Temerario" llevó una de estas hasta 112 km/hora pasando el Empalme Verde.
- ¿Cree que es posible llevarla hasta 144 km/hora? - ¡144!
- Diablos hijo, pero ¿por qué llevarías tanta prisa?

Hace unos días estuve viendo por enésima vez la saga REGRESO AL FUTURO (cuanto más la veo, más me gusta). Esta breve conversación pertenece a la tercera entrega, en una escena en la que están hablando de poner la locomotora a la velocidad mencionada. Me llamó la atención esta parte del diálogo, puesto que hacía referencia a la “prisa”.

"¿Para qué llevarías tanta prisa?"

Hace unos cuantos años algunos, muy pocos, poníamos en duda el proyecto del tren de alta velocidad. ¿Para qué sirve un proyecto tan…faraónico, aparte de mostrar al mundo de lo que somos capaces? ¿Quién tiene tanta prisa? 
Y sobre todo: ¿Cuánto nos va a costar? Pregunta, que por cierto, nadie se hacía.
 Visto que nadie le ponía objeción alguna (salvo los “radicales” extemporáneos de toda la vida), moderé mis críticas, no vaya a ser que me terminasen de identificar con uno de ellos. Pero en el fondo yo me seguía haciendo preguntas que nadie respondía: Para ir un poco más rápido ¿Cuánto nos va a costar? Y… ¿Para qué ir más rápido? ¿A dónde... a dónde queremos llegar?

Nadie podía y nadie puede responder a estas preguntas.

Y es que nos las hemos prometido muy felices para llegar 15 min. antes a cualquier parte. Yo he hablado con personas que estaban maravilladas del AVE Madrid-Barcelona, las cuales eran absolutamente inconscientes de que JAMÁS se amortizará tal inversión. Y he dicho JAMÁS con conocimiento de causa. Y eso no es lo peor. ¿Cuánto tiempo se ahorra? ¿Sabemos que las líneas de ferrocarril tradicionales, con unas pocas mejoras serían casi tan rápidas como las de Alta Velocidad? No, porque nadie nos lo ha contado.

NADIE TIENE TANTA PRISA. La prisa es algo... artificial que hemos incorporado a nuestras vidas para comernos el mundo a trocitos mientras corremos de un lado para otro, sin rumbo. ¿Cómo voy a ir andando si puedo ir en bici? ¿Cómo voy a ir en bici si puedo ir en coche? Cómo voy a ir en coche si puedo ir en AVE?

Pero la pregunta que no queremos hacernos es:

¿PARA QUÉ?

En estos últimos años han nacido algunos movimientos que tratan de contrarestar esta sinrazón: slowcitys, slow food, etc. Esta gente nos propone una forma diferente, más tranquila, más humana, de vivir la vida, sin prisas, utilizando nuestro tiempo en contemplar, en sonreír, en disfrutar.

La actual crisis, si algo puede tener de bueno es que nos da la oportunidad de reflexionar. Me temo que no lo vamos a hacer puesto que sólo estamos pensando en lo que debemos hacer para volver a ser los de antes. ¡Craso error!

¡No perdamos la oportunidad! ¡Aprovechemos para repensar nuestro modo de vida!