ME VOY A DAR LA VUELTA AL MUNDO EN TREN: Días 3 y 4 de marzo

DÍA 3 DE MARZO

Gran sueño reparador. 

No lo he contado, pero entre una cosa y otra el día anterior habíamos andado más de 12,5 km, que sumado a lo poco y mal que habíamos dormido, nos había dejado totalmente agotados. También es cierto que no hubiésemos sido tan “kamikazes” si la hora de nuestro tren del día siguiente a Varsovia no hubiese sido a las 9,38 h, así que tuvimos margen para desayunar con calma y todos los demás preparativos de la partida.

El trayecto era relativamente corto, puesto que llegaríamos a Varsovia hacia las 15,30 h., disponiendo de esa tarde y casi dos días más antes de coger el siguiente tren a Kiev. Está vez el tren no tenía wifi, así que tuvimos que usar los datos contratados para la búsqueda de información sobre Varsovia. Un poco de lectura y algunas fotos por la ventanilla, llenaron el resto del tiempo.

Llegamos tarde a nuestro destino. Empezamos a tener la sensación de que lo de los retrasos es una costumbre, puesto que la llegada a Varsovia se produjo casi una hora después de la hora prevista. Cambiamos algo de dinero a la moneda local (el Zloty) y cogimos un tranvía hasta el hotel. Me gustaron los tranvías, tienen un aire antiguo muy característico. La ciudad está llena de ellos. Lloviznaba.

Tomamos posesión de nuestra habitación en el hotel.

En cuanto a la información que fuimos recogiendo sobre Polonia y su capital, me sorprendió lo desconocida que resulta para los occidentales más occidentales. ¡Qué poca información manejamos sobre la mayoría de los países! ¡Qué falta de curiosidad!

Situada prácticamente en el centro de Europa, y por lo tanto en uno de los puntos estratégicos más importanes, Polonia ha sido invadida o ha tenido problemas para mantenerse libre 43 veces del 1600 al 1945. Varsovia fue una de las ciudades más afectadas por la Segunda Guerra Mundial. Quedó destruida en un 85% y el barrio antiguo en un 95%. Su casco antiguo fue totalmente reconstruido, con tal precisión y mimo, que aunque apenas tiene algo más de medio siglo, que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Por su belleza, Varsovia era considerada la “París del Norte” hasta la Segunda Guerra Mundial. Después pasó a ser denominada la Ciudad Fenix, por su larga historia de reconstrucción después de haber sido destruida en más de un 85% durante ese conflicto armado, tal y como ya he dicho.

Y por cierto, la primera biblioteca pública del Mundo se abrió precisamente aquí en 1747.

Tocaba descansar. Los primeros 2.500 km ya estaban hechos.

DÍA 4 DE MARZO

“¿Españoles? Aquí mucho vino, mucha cerveza, no coronavirus”. Nos dijo una persona que estaba repartiendo folletos de propaganda de un restaurante. No es que hubiese muchos turistas pero precisamente por eso la pelea por conseguir algún cliente se presentaba más dura. Estábamos haciendo un free tour por la parte antigua, que nos llevó un par de horas.

Otra de las anécdotas mientras hacíamos el tour, fue subir a la "montaña de mierda", lugar donde antiguamente había unos baños públicos, cuya “mierda” ahora estaba cubierta, formando esa colina. En el mirador de la "montaña" hay verja llena de candados, de esos que se pusieron de moda hace unos años, para sellar el amor eterno de una pareja. La gracia está en que la gente va a certificar su amor eterno encima de la “montaña de mierda”, lo cual no parece que sea un lugar que ofrezca muchas garantías para la duración de esos amores.

Más allá de las anécdotas, fue un día tranquilo. Turismo por la mañana, paseo por el centro por la tarde. Eso sí, uso intensivo del transporte público que en esta ciudad es muy barato, al menos para nosotros.