En la vida diaria me suele funcionar bastante bien el principio de Hanlon: “Nunca atribuyas a la maldad lo que puede ser explicado por la estupidez”. Me ayuda a relativizar bastante bien las imbecilidades que suelen hacer y decir muchos de los seres humanos que me rodean.
Como siempre hay colectivos que te descolocan bastante, no sabes realmente si son simplemente estúpidos o malas personas. Suelo terminar concluyendo que son ambas cosas.
Esto
último casi siempre me pasa con el P.P. y desde que está Vox en el
escenario político, lo compruebo casi todos los días. También tengo que decir que con el resto del elenco político también me pasa, no tanto, pero me pasa.
Oigo el argumentario que utilizan, lleno de sinsentidos, carentes de toda lógica y se me queda una cara como diciendo: “¿Pero esta persona está bien de la cabeza?” Manteniendo esta duda, termino concluyendo que de lo que se trata es de ahí hay un porcentaje muy alto de estupidez. Pero ya cuando, después de quedarme ojiplático con tal nivel de razonamiento, pretenden obstaculizar por todos los medios leyes que únicamente nos hacen más libres, ahí sí, ahí me doy cuenta de que en esas mentes perversas sólo existe maldad, egoísmo y ansias de dominación.
Efectivamente, estoy hablando de la Ley de la Eutanasia o la Ley del Divorcio que se aprobó en su día, o en la del Aborto o la ley del Matrimonio Igualitario… Y tantas y tantas otras leyes que han intentado (y conseguido a menudo) frenar.
Nadie les obliga a divorciarse o a abortar o a terminar con su propia vida, pero pretenden por todos los medios que nosotros no podamos utilizar derechos tan básicos como esos. Eso sí, aprobadas las leyes, no creas que rechazan su uso, todo lo contrario, son los primeros en utilizarlas cuando les conviene. Faltaría más.
¿Y la Iglesia? Siempre en primera fila cuando se trata de mantener esclavizado al personal, amenazando con el Fuego Eterno. ·Eso sí: Me encanta verles echar exabruptos por esa boquita cada vez que aprobamos leyes como la de la Eutanasia. ¡Qué gozada!
Y luego, esa forma tan retorcida de manejar el concepto “Libertad”. A ver si lo entiendo bien: Libertad es pagar entre todos la enseñanza privada que pretenden para su hijos, en detrimento de la púbica. ¿No es eso? O subvencionar las corridas de toros para que ellos, puedan disfrutar “libremente” de un entretenimiento decimonónico. “El que no quiera ir que no vaya”, dicen ellos. “El que quiera enseñanza privada y toros que se los pague al 100%", digo yo.
Pero centrémonos en la reciente victoria. Tenemos una Ley de la Eutanasia que nos hace a todos un poquitín más libres, incluso a ellos, que podrán decidir entre morir lentamente y entre horribles dolores o ir a visitar a su dios de una manera un poco más… humana.
Disfrutemos
de este gran día.
6 comentarios:
Me inspira usted ternura, como cuando te viene el nietecico enfadado con el mundo mundial y luego se le pasa con un caramelico de menta :-) saluditos y feliz Navidad, hombre ^_^
La estupidez no se les supone. Está perfectamente demostrada. Pero pasas de largo en el hecho, también demostrado, que muy cerca del corazón llevan la cartera y ante eso se difuminan las creencias y son livianas las religiones.
Un abrazo.
Gracias "Así nos va".
Ahora me siento mucho mejor :-)
Mucha razón tienes amigo Juan :-)
Un abrazo.
Me preocupo poco porque traten de eliminar esta ley sobre la eutanasia, no lo harán, a la iglesia esta ley no le cuesta dinero, lo mismo que la del divorcio o la del aborto, simplemente chillarán y con eso se conformarán, no ocurrirá lo mismo que con la ley Celáa que si la derogarán enseguida que puedan, el dinero de la enseñanza concertada está en juego. HIPOCRESÍA elevada a la enésima potencia.
un abrazo.
Hola Emilio Manuel.
La sociedad no está concienciada, es evidente. Esta pelea va a durar mucho.
Un abrazo.
Publicar un comentario
Después de pulsar PUBLICAR UN COMENTARIO, pulsa TAB hasta ver bien la palabra de verificación. Gracias.